José María Manzanares ha cortado dos orejas al primer toro de su lote en una labor asentada que fue a más en todos los niveles, estético, bello y puro. A base de técnica, Manzanares consiguió corregir los defectos del toro, que cabeceaba con violencia al final del muletazo, y logró muletazos de bello trazo y gran pureza y temple. Una estocada fulminante acabó con el toro en menos de 10 segundos.
Con el quinto de la tarde poco pudo hacer ante la descastada embestida que ofrecía el de Los Ramírez. Con este triunfo, José María suma su segunda corrida del año 2010 con éxito y sigue redondeando una gran temporada americana donde ya se sucedieron triunfos en México, Valencia, Lima y ahora San Cristóbal.