Panelista salió tercero, su nobleza permitió el buen andar de Manzanares con la muleta. El diestro español empleó faena en la que todos los muletazos estuvieron llenos de temple y fueron siempre embraguetándose el toro. El de Alicante edificó una faena que emocionó a los tendidos y con una tanda de naturales puso en pie al público. Pero todo no podía ser color de rosa, los grandes también pinchan y Manzanares lo hizo en 4 oportunidades. Silencio en su primero.
José María Manzanares bajo un diluvio recibía el sexto de la tarde, un toro parecido al quinto, manso, sin recorrido, que en lo absoluto puso de su parte para que el diestro español no se fuera en blanco hoy en su debut en la plaza de toros de Manizales. Silencio y silbidos para el toro y el ganadero. Por Mateo Saavedra para Cultoro.com